Si pasaste por la Legislatura de Salta hace unos días seguramente viste una manifestación de Greenpeace sobre la situación de los bosques nativos.
En Argentina, se reconoce que los ecosistemas de bosques son esenciales para asegurar la calidad de vida de las personas y el sostenimiento de la biodiversidad. Por ello, a través de la Ley Nacional de Bosques (N° 26.331) se establecen las herramientas y lineamientos mínimos para ordenar el territorio, estableciendo qué tipo de actividades pueden realizarse en determinadas zonas de bosque (Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos – OTBN). De esta manera, se identifican zonas boscosas donde solamente puede realizarse conservación, zonas donde pueden realizarse actividades de restauración ó productivas sostenibles, y zonas plausibles de explotación. Particularmente, la provincia de Salta adhirió a la ley nacional en 2009, lo que la obliga a realizar su propio mapa de zonificación de usos del bosque y por ley debe revisarse cada 5 años (es decir que su revisión debería haberse realizado en 2014).
Durante los últimos dos años un Equipo Técnico constituido por numerosas instituciones (CONICET, INTA, Gobierno de Salta, entre otras), estuvo abocado a la revisión y actualización de este mapa. En enero de 2024, la organización ambientalista Greenpeace emitió un documento, disponible en su página web, con cinco observaciones a dicho proceso, y el pasado 27 de agosto la organización realizó una manifestación en reclamo al proyecto presentado por el Equipo Técnico para su tratamiento en la Legislatura.
Para mejorar el entendimiento sobre la revisión del OTBN y del reclamo realizado entramos en contacto con Lucas Seghezzo (Equipo Técnico a cargo de la revisión) y Noemí Cruz (Greenpeace).
Durante la manifestación frente a la Legislatura, Noemí Cruz dijo que la organización no participó del proceso de revisión porque “el principal requerimiento para poder hablar sobre el tema de ordenamiento territorial, era que se detuvieran los desmontes, porque no se puede hablar mientras va desapareciendo el bosque”.

Fotografía: PachaData
De las observaciones realizadas por Greenpeace en su página web, el punto 3 expresa que “La zonificación propuesta no respeta el principio de no regresión ambiental ya que se permite… el desmonte en zonas actualmente clasificadas en rojo y amarillo”. El principio de no regresión ambiental busca que el sistema no tenga retrocesos en los avances ya alcanzados. Sobre esto, Lucas Seghezzo con el apoyo del Equipo Técnico respondió “que el mapa vigente no respetaba los criterios de sustentabilidad ambiental establecidos por la ley y se elaboró con información incompleta y desactualizada… El nuevo mapa corrige esos errores con nueva información y herramientas informáticas actualizadas.”
Otro tema controvertido en el informe técnico presentado a la Legislatura es la nueva categoría denominada Área de Producción y Conservación (APC – marrón). Esta categoría considera superficies dentro de las cuales se pueden desarrollar proyectos de cambio de uso de suelo, hasta agotar el stock total (superficie total) de áreas verdes (721.568 ha). El APC remanente, una vez agotada la superficie de áreas verdes, se transformaría en áreas amarillas.
Greenpeace, en el mismo punto 3 de sus observaciones, expresa que la creación de una nueva categoría APC “puede implicar decisiones arbitrarias y no está considerado en la ley nacional”. Tal como un semáforo, la ley nacional establece tres colores para usos del suelo (verde, amarillo y rojo). De acuerdo con el informe técnico, la nueva estrategia minimiza el conflicto entre producción y conservación con beneficios ambientales.
Greenpeace considera que la habilitación 721.568 hectáreas como área verde para cambio de uso del suelo “es una superficie sumamente excesiva”. Sin embargo, Seghezzo objeta que “esta superficie es un 30 % inferior a lo que se aprobó en 2009”.
La estrategia de considerar una superficie amplia posible de utilizar dentro de la cual hay un stock menor, a definir, de hectáreas que permiten cambio de uso del suelo no tiene antecedentes en provincias argentinas y su correcta implementación representa un desafío y compromiso para la Secretaría de Ambiente de Salta.
Indudablemente, la discusión en torno al Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos, no solo en Salta sino en todo el país, reviste una gran complejidad y urgencia. Como sociedad, debemos interiorizarnos y no solo centrar el debate en cifras sino en estrategias que permitan asegurar la coexistencia del bienestar humano y la biodiversidad. Por este motivo, seguiremos desarrollando este tema en otras ediciones.